(CNN) — La policía de Brasil arrestó a cinco personas, incluido un exasesor del expresidente Jair Bolsonaro, por un supuesto complot para asesinar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva en 2022, dijeron las autoridades.
El complot golpista se concibió a fines de 2022, antes de que Lula asumiera el cargo, según la Policía Federal. Además de matar al entonces presidente electo, el complot también incluía planes para capturar o matar al vicepresidente de Lula, Geraldo Alckmin, y al juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes, dijo la Corte Suprema en su orden de arresto.
La orden, firmada por Moraes el domingo, autoriza la detención preventiva de los cinco sospechosos, incluido el general retirado Mário Fernandes.
Fernandes fue anteriormente el segundo ejecutivo de mayor rango de la Secretaría General de la Presidencia durante la administración de Bolsonaro, informó CNN Brasil. No está claro si tiene un abogado.
CNN se comunicó con un representante de Bolsonaro para obtener comentarios.
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El supuesto complot también involucró a otros militares con entrenamiento en fuerzas especiales, dijo la Policía Federal.
“La planificación elaborada por los investigados detalló los recursos humanos y militares necesarios para llevar a cabo las acciones, utilizando técnicas avanzadas de operaciones militares”, dijo la policía.
El plan preveía la eventual creación de una “Oficina de Gestión de Crisis Institucional” en el Gobierno de Brasil que los golpistas controlarían, según la policía.
Según la orden judicial, los presuntos conspiradores también consideraron varios métodos para llevar a cabo los magnicidios, incluido el uso de veneno o dispositivos explosivos.
“Para la ejecución del presidente Lula, el documento describe, considerando su vulnerabilidad de salud y frecuentes visitas a hospitales, la posibilidad de usar envenenamiento o productos químicos para provocar un colapso orgánico”, se lee en la orden de Moraes, citando una investigación sobre el complot.
Además de los cinco arrestos, la policía dijo que los sospechosos tendrían prohibido salir del país o contactar a otras personas sospechosas de estar involucradas en el complot, según muestran los documentos.
En febrero de este año, Bolsonaro fue puesto bajo investigación por el supuesto complot. Se espera que la investigación concluya a finales de este mes, informó Reuters, citando a una fuente con conocimiento directo de la investigación.
Según la orden policial realizada hoy, Bolsonaro supuestamente se reunió con funcionarios del ejército y la marina, así como con el ministro de Defensa, en diciembre de 2022 para presentar un documento que detalla el marco legal que lo mantendría en el poder.
El expresidente ha negado repetidamente las acusaciones de un complot golpista. Su hijo, Flavio Bolsonaro, senador del Congreso brasileño, sugirió en una publicación en X que los cinco sospechosos no habían cometido ningún delito.
“Por repugnante que sea pensar en matar a alguien, no es un delito. Y para que haya un intento, la ejecución debe ser interrumpida por alguna situación fuera del control de los perpetradores. Lo que no parece haber sucedido”, escribió.
En octubre de 2022, Lula venció por poco a Bolsonaro en las elecciones presidenciales. Los simpatizantes de Bolsonaro rechazaron los resultados y se amotinaron en la capital, Brasilia, asaltando edificios gubernamentales el 8 de enero de 2023.
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